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Registro del ritmo cardíaco de su hijo

El ritmo cardíaco es el patrón fuerte y rítmico de contracción del músculo cardíaco para bombear la sangre al cuerpo y a los pulmones. Se controla por medio de un tejido que envía señales eléctricas originadas en el corazón, esto se conoce como sistema de conducción. La frecuencia o el patrón de los latidos se llama ritmo cardíaco. Los ritmos cardíacos anormales reciben el nombre de arritmias. Las arritmias pueden ocasionar síntomas, como aturdimiento, mareos, baja presión arterial, desmayos o fatiga, en el niño. En pocas ocasiones, las arritmias pueden causar problemas más graves. Para que el proveedor de atención médica pueda obtener más información sobre el ritmo cardíaco de su hijo, es posible que le hagan pruebas. Entre ellos, se encuentran los siguientes:

Un proveedor de atención médica haciendo un electrocardiograma a un niño mientras una mujer los mira.
Durante un ECG, se colocan unos electrodos en el pecho, los brazos y las piernas para detectar trastornos del ritmo cardíaco de su hijo.

  • Electrocardiograma (ECG). En esta prueba, se registran en una tira de papel los impulsos eléctricos producidos por el corazón de su hijo. El patrón de estas señales permite al proveedor de atención médica saber si el corazón del niño es normal, está haciendo esfuerzos o tiene problemas eléctricos o arritmias. Con esta prueba, también se pueden encontrar problemas con el mecanismo de bombeo del corazón. La prueba dura menos de un minuto.

  • Monitoreo Holter. El monitor Holter es un aparato portátil que debe usar el niño y permite registrar el ritmo cardíaco durante todo el día. Se registra el ritmo cardíaco de manera continua durante 24 a 48 horas. Así, el proveedor de atención médica puede revisar si hay arritmias que se produzcan con frecuencia, pero al azar.

  • Registrador de episodios. El registrador de episodios es un aparato portátil que debe usar el niño durante un máximo de un mes. Se usa para registrar el ritmo cardíaco de su hijo en el momento que tiene síntomas. Así, el proveedor de atención médica puede revisar si hay arritmias que se produzcan al azar y de manera poco frecuente. Cuando aparecen los síntomas, usted o el niño pueden presionar el botón para registrar el ritmo cardíaco en ese momento.

La experiencia de su hijo: electrocardiograma (ECG)

  • Antes de la prueba. Su hijo debe vestir ropa holgada y cómoda, que permita un fácil acceso al pecho.

  • Durante la prueba. Su hijo se acuesta quieto en una camilla de exploración. Se pegan unos electrodos (pequeñas almohadillas adhesivas) en el pecho, en los brazos y en las piernas del niño. Los electrodos registran el ritmo cardíaco de su hijo y cualquier cambio en las señales del corazón que se produzca durante la prueba. Después de varios minutos de registro de datos, el técnico le quita los electrodos.

  • Después de la prueba. A menos que le indiquen lo contrario, su hijo puede reanudar su rutina habitual. El proveedor de atención médica podría darle los resultados preliminares después de la prueba. Le darán los resultados completos cuando se haya revisado totalmente el ECG.

La experiencia de su hijo: control Holter o registro de episodios

  • Antes de la prueba. Es posible que deba llevar a su hijo al hospital para que le pongan un monitor Holter o registrador de episodios. También puede organizar con una empresa externa para que le entreguen el monitor o el registrador en su casa y le enseñen a usarlos. En el caso del monitor Holter, los electrodos se conectan desde el aparato al pecho del niño. Normalmente, el monitor se lleva puesto en la cintura (en un cinturón) o sobre el hombro (dentro de una bolsa). Probablemente le darán a su hijo un chaleco de malla para que se lo ponga debajo de la ropa, a fin de proteger el monitor contra posibles daños. En el caso del registrador de episodios, no necesariamente hace falta conectar los electrodos al pecho. Es posible que su hijo tenga un registrador que se lleva puesto sobre el cuerpo como el monitor Holter, o bien un aparato que se transporta aparte.

  • Durante la prueba. Su hijo debe hacer sus actividades diarias normales. Usted o su hijo tendrán que llevar un registro escrito de estas actividades. Si su hijo tiene un monitor Holter o un registrador de episodios que se lleva puesto en el cuerpo, no bañe al niño con el aparato puesto. Evite mojarlo. Tampoco le quite la camisa a su hijo para prevenir posibles daños al monitor. Retire el monitor Holter o el registrador de episodios tal como le indique el proveedor de atención médica de su hijo. Si el registrador de episodios no se lleva puesto en el cuerpo, debe colocarse contra el pecho al momento en que ocurran los síntomas. En esa ocasión se oprime un botón para registrar el ritmo cardíaco del niño durante 1 minuto. Siempre siga las indicaciones del proveedor de atención médica de su hijo para obtener la lectura más precisa del monitor.

  • Después de la prueba. Devuelva el monitor Holter o el registrador de episodios cuando finalice la prueba. A continuación, se comparan y se analizan el ritmo cardíaco registrado por el aparato y el diario de actividades. El proveedor de atención médica de su hijo le presentará los resultados en una consulta de seguimiento.

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