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Tratamiento del cáncer en los niños: quimioterapia

En la quimioterapia o "quimio" se usan medicamentos para combatir el cáncer que destruyen las células cancerosas. La quimioterapia puede administrarse sola o con cirugía, radioterapia u otros medicamentos contra el cáncer (como la terapia dirigida) para reducir el tamaño de un tumor o evitar que se propague. Los medicamentos de quimioterapia son fuertes. Suelen provocar efectos secundarios, como náuseas y caída del pelo. Hay menos medicamentos para la quimioterapia aprobados para niños que para adultos. A veces, los niños reciben quimioterapia en un ensayo clínico.

Las metas de la quimioterapia

La quimioterapia se utiliza para lo siguiente: 

  • Destruir las células cancerosas o impedir que las células cancerosas sigan creciendo y dividiéndose

  • Reducir el tamaño del tumor antes de la cirugía (terapia neoadyuvante) o destruir las células cancerosas que queden después de la cirugía (terapia adyuvante)

  • Causar la remisión (que no haya evidencia de la enfermedad en los análisis médicos)

  • Curar el cáncer (que no haya evidencia de la enfermedad años después del tratamiento)

  • Ralentizar la progresión del cáncer y aliviar los síntomas

Cómo actúa la quimioterapia

Cuando se administra quimioterapia, se utilizan medicamentos para destruir las células cancerosas. Sin embargo, también daña las células sanas, en especial aquellas que crecen con rapidez. Estas incluyen las células de la boca, la sangre, la piel y el pelo. Es por esta razón que ocurren los efectos secundarios, como la caída del pelo. La quimioterapia se administra en ciclos (un período de tiempo en días o semanas). Después de que termina un ciclo de tratamiento, se deja que pase un tiempo para que las células normales puedan recuperarse antes de que comience el ciclo siguiente.

Cómo se administran los medicamentos de quimioterapia

  • VíaIV (intravenosa).  Se coloca una sonda pequeña, llamada intravenosa, en una vena del brazo o de otra parte del cuerpo para administrar los medicamentos de quimioterapia. A veces, se coloca una vía IV permanente por medio de una cirugía (a menudo en el pecho). Esto se llama línea venosa central o vía central. Esta vía permite administrar los medicamentos y otros tratamientos sin tener que colocar una nueva vía IV cada vez que sea necesario. Las vías IV son las formas más comunes para administrar los medicamentos de quimioterapia.

  • En forma líquida o en pastillas. Los medicamentos se administran por vía oral (por la boca) y se tragan.

  • Inyección. Los medicamentos se inyectan en un músculo del brazo o la pierna, o en la capa de grasa debajo de la piel, en la zona abdominal.

  • Por inyección intratecal. Los medicamentos se inyectan en la parte inferior de la columna vertebral. Este procedimiento se denomina punción lumbar (punción raquídea). El medicamento ingresa directamente en el líquido cefalorraquídeo de la médula espinal. Esta forma de administrar quimioterapia es importante porque determinados tipos de cáncer crecen en el líquido cefalorraquídeo.

Es posible que a su hijo le administren quimioterapia en el hospital, en una clínica o en su casa. Pueden administrarle más de 1 medicamento a la vez. Esto se conoce como quimioterapia combinada. Puede ser más eficaz para destruir células cancerosas.

Le hacen un tratamiento de quimioterapia de infusión a una joven.

Efectos secundarios de la quimioterapia

Los efectos secundarios ocurren cuando la quimioterapia daña las células normales. La mayoría de los efectos secundarios son de breve duración y desaparecen poco después de finalizado el tratamiento. Pero otros pueden ser a largo plazo o permanentes. En casos más graves, los efectos secundarios pueden aparecer meses o incluso años después del tratamiento. Cada medicamento de quimioterapia puede tener sus propios efectos secundarios. Si su hijo recibe un tratamiento combinado con más de 1 medicamento, puede haber más efectos secundarios. Y pueden ser más graves. Pregúntele al proveedor de atención médica de su hijo qué efectos secundarios podría tener el niño. No es probable que su hijo tenga todos los efectos secundarios. Pero pueden presentarse algunos de los siguientes:

Efectos secundarios a corto plazo

Estos efectos pueden ocurrir durante el período de tratamiento:

  • Mayor riesgo de infección

  • Sangrado

  • Anemia (una afección que ocurre cuando la sangre no tiene suficiente cantidad de glóbulos rojos para transportar oxígeno por todo el cuerpo)

  • Caída del cabello

  • Cambios del estado de ánimo

  • Mareos

  • Problemas de concentración

  • Cansancio (fatiga)

  • Torpeza

  • Dolor muscular

  • Llagas en la boca o los intestinos

  • Dolor de estómago

  • Náuseas y vómitos

  • Diarrea

  • Estreñimiento

  • Reacción alérgica, como urticaria o comezón

  • Dolor, entumecimiento u hormigueo en las manos o los pies

  • Sarpullido

Efectos secundarios crónicos

Estos son efectos secundarios más graves que pueden aparecer hasta meses o años después del tratamiento:

  • Infertilidad

  • Daños en determinados órganos, como el corazón, los riñones, el hígado o los pulmones

  • Daño duradero en los nervios

  • Desarrollo de otro cáncer más tardío

Tratamiento y pruebas

Su hijo tendrá citas de seguimiento para controlar los efectos secundarios de la quimioterapia.

Probablemente su hijo recibirá medicamentos para tratar los efectos secundarios a corto plazo de la quimioterapia. Estos incluyen medicamentos para aliviar las náuseas, los vómitos, la diarrea, el estreñimiento y el dolor. El equipo de atención médica también le enseñará a ayudar a mantener bajo control los efectos secundarios de su hijo. Además, es posible que le hagan algunas pruebas al niño para detectar posibles efectos secundarios a largo plazo, como daños en los órganos. Hable con el proveedor de su hijo sobre estas pruebas.

Cuándo llamar al proveedor de atención médica de su hijo 

Asegúrese de conocer el número al que debe llamar el proveedor de atención médica de su hijo cuando este tenga efectos secundarios. ¿Hay otro número al que llamar durante las tardes o los fines de semana y días festivos? Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si nota que su hijo presenta cualquiera de estos síntomas:

  • Temperatura de 100.4 °F ( 38°C) o superior, o según lo que le haya indicado el proveedor

  • Escalofríos

  • Dolores de cabeza o cambios en la vista

  • Mareo o aturdimiento

  • Confusión

  • Problemas de concentración

  • Fatiga constante

  • Debilidad en las manos o los pies

  • Torpeza

  • Dolor que no se alivia, especialmente si es siempre en el mismo sitio

  • Bulto, protuberancia o hinchazón nuevo o anormal

  • Náuseas y vómito descontrolados

  • Diarrea que no mejora con el tiempo

  • Estreñimiento

  • Pérdida de peso

  • Deshidratación

  • Erupción en la piel, moretones o sangrado anormales

  • Rotura de la piel o dolor intenso por irritación cutánea

Cuándo llamar al 911

Llame al 911 de inmediato si su hijo tiene alguno de los siguientes síntomas:

  • Dolor de pecho

  • Dificultad para respirar

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